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Y el comentario que suscita:
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«Todavía hay catalanes que creen en un «encaje» de Catalunya dentro España, pero son cada vez menos, los cálculos que hace ahora no son de un tercio en contra, es de la casi mitad de catalanes que ya hemos «desconectado» de España, y queremos un estado propio no subordinado al DesGobierno Central y corrupto de Madrid. España jamás a podido digerir a Catalunya, ni encajarla, ni lo hará ahora, porque no tiene voluntad de hacerlo ni capacidad de hacerlo, no hay que perder más tiempo, ni esfuerzos por esa vía, lo de CiU haciendo de correveidile entre Barcelona y Madrid a pedir que nos dejen vivir con lo nuestro, sin ponernos palos en las ruedas constantemente y pagando 3.000 euros año por catalán por el «privilegio» de ser español y «depender» de España. El tiempo del «peix al cove» para luego ver cómo luego Madrid recupera lo que cede, ha pasado, no lo vamos a aceptar, y además mientras País Vasco y Navarra resulta que ya tienen lo que efectivamente pretendíamos un pacto fiscal. No, ahora ya no estamos por un pacto fiscal imposible, Catalunya en el 20% de PIB de toda España, y con el 16% de población, nunca tendrá un pacto como el País Vasco y Navarra, además porque los catalanes siempre hemos sido vistos con animadversión. Cuando Fernando el Catolico, que hizo a España con Isabel, se iba a su tierra desde Castilla, ya desencantado, por los pueblos Castellanos que pasaban le llamaban «catalanote», en casa intentaría concebir un hijo, si lo hubiera tenido la historia había sido muy distinta, murió de empacho porque le dieron un guisote a base de testiculos de toro, por aquello de que de lo que se come se cría.
Notese que a Fernando él Católicos, prototipo de gobernante «moderno» él quien pensaba Maquiavelo cuando escribía el Príncipe para los Medicis, le llamaban «catalanote» y no «aragonesote», y es que la corona Catalano aragonesa, Arago, era catalana, tanto que hasta la coronación de los condes de Barcelona y reyes de Arago, en Zaragoza era en catalán, como sus leyes y los gritos de los almogavars al entrar en combate, ya saben «Desperta ferro», «Arago», «Sant Jordi».